Llegamos al final del segundo mes de año y con ello damos la bienvenida a las celebraciones de los carnavales bercianos. Sabemos que en nuestra comarca tenemos gran cantidad de tradiciones. Una vez más, nos llena de orgullo descubrir que lejos de perderse, se imponen haciendo sacar una sonrisa a más de uno de nuestros mayores al ver que sus raíces siguen presentes entre los más jóvenes.
Nuestra cultura
También conocido en nuestra zona como entroido, lo cierto es que en la comarca tenemos gran pluralidad de tradiciones que giran en torno a esta fiesta. Todas ellas con un nexo de unión común: la importancia de una buena máscara. No obstante, cada pueblo tiene su entroido particular y digno de disfrutar aunque sea una vez en la vida.
Hoy os traemos dos de las formas en las que pueblos de nuestras tierras celebran esta festividad. Coge papel y boli y apunta estos planes que te proponemos para el fin de semana.
El Entroido de Valtuille
Valtuille, el pueblo en el que los jóvenes recuperaron una de sus más ancestrales tradiciones en el 2019 tras varios años sin celebrarse. El día propio para su celebración es el martes de carnaval. La tradición tiene como pilar central una figura que puede llegar a medir hasta 7 metros de altura. Antiguamente se fabricaba con centeno y trigo pero en la actualidad, han optado por hacerlo con «xestas» o paja.
Quizás el punto álgido de la noche es la quema de esta curiosa estatua tras haberle realizado un juicio en el que hay quienes lanzan alegatos en contra de su quema y otros a favor.
En torno a ella, máscaras hechas por los festejantes, farrapos como vestimenta y el personaje del «gocho» están presentes toda la noche para culminar con lo que más nos gusta a los bercianos: una buena botillada.
Los Maranfallos de Burbia
Burbia y sus peculiares tradiciones. En esta pequeña zona es típica su celebración de los Maranfallos. Disfrazados con «trapallos» una noche al año tras la llamada al grito de “Maranfallín, maranfallín cara de gatín” desde el punto más alto del pueblo y el sonido de cacerolas retumbando entre sus callejones, sus calles se llenan de seres que aterrorizan a los vecinos y visitantes.
Equipados con «xestas», cinsa o su tradicional «bragallo», si los ves no te queda otra que intentar escapar de ellos. Otro personaje típico es la salida del «boi». Con el sonido de su choca lo escucharás por todo el pueblo. Pero tampoco temas, es una tarde en la que las risas y adrenalina están aseguradas.
¿Qué te han parecido estas tradiciones? ¿Ya las conocías? Cuéntanoslo en nuestro facebook.