¿Sabes qué fue La Fiebre del Oro Negro? La ciudad del dólar, espionaje internacional y la fiebre que se convierte en locura.
Suena casi de película pero todo esto pasó en El Bierzo. Una comarca tranquila que vivió su época más caótica en los años 40.
Los años locos
Es en 1940 cuando dos hermanos de origen berciano descubren el mineral que hará revolucionar la comarca: el wolframio. Este descubrimiento se localiza en la peña del Seo. Intentando que no se enterara nadie, llevaron mercancía para vender al pueblo de Quereño. A partir de aquí, todo suena a Hollywood. Se descubrió el yacimiento y empezó la Fiebre del Oro Negro.
El contexto de El Bierzo era miseria, caos y anarquía. Las armas de fuego imponían su ley y el wolframio era una forma de ganar dinero rápido. Hombres, mujeres y niños, todos trabajaban en su extracción. La demanda crecía con motivo de la II Guerra Mundial ya que era el material perfecto para la fabricación de armas.
Pero con el fin de la misma, la demanda cayó y gran parte de la gente se fue.
La segunda etapa viene en 1950 con la Guerra de Corea. En esta época se levantó un poblado en el que se construyeron más de 40 viviendas. Fue en el 58 cuando se cerraron definitivamente las minas.
¿Y ahora?
En la actualidad, quedan los restos de aquel poblado fruto del abandono y del expolio que sufrió a partir de 1974 cuando la última familia dejó el pueblo. Pero, pese a todo eso, aún queda gran cantidad de material bajo esas minas.
Hoy esta zona está dentro de la Lista Roja del Patrimonio que promueve la asociación Hispania Nostra en la que se agrupan elementos del Patrimonio Histórico Español en riesgo de desaparición.
La historia que rodea a El Bierzo es muy amplia y es nuestra labor conservarla ya que fueron nuestros antepasados los que lucharon y trabajaron por lo que es ahora nuestra comarca
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